Consecuencias de no pagar los impuestos de tu empresa en Reino Unido

Las consecuencias de no pagar los impuestos de una empresa en el Reino Unido pueden ser graves a nivel legal y financiero.

No pagar los impuestos de tu empresa en Reino Unido  tiene graves consecuencias y es que el sistema fiscal británico es riguroso y las autoridades fiscales, conocidas como Her Majesty’s Revenue and Customs (HMRC), tienen amplios poderes para hacer cumplir las obligaciones tributarias.

Consecuencias inmediatas

En primer lugar,  la HMRC impondrá multas y recargos por el retraso en el pago de impuestos. Estas sanciones pueden acumularse rápidamente y aumentar significativamente la deuda fiscal original.

Las multas pueden variar dependiendo del tipo de impuesto y la duración del retraso, pero generalmente comienzan con un porcentaje del impuesto adeudado y aumentan con el tiempo.

Además de las multas, se aplicarán intereses sobre la cantidad adeudada. Estos intereses se calculan diariamente, lo que significa que cuanto más tiempo se demore el pago, mayor será la deuda total.

Acciones legales

Si la empresa continúa sin pagar sus impuestos, la HMRC puede iniciar acciones legales más severas:

Embargos

La HMRC tiene el poder de embargar activos de la empresa para recuperar la deuda fiscal. Esto puede incluir cuentas bancarias, propiedades o equipos.

Orden de liquidación

En casos extremos, la HMRC puede solicitar una orden judicial para liquidar la empresa si no puede pagar sus deudas fiscales.

Responsabilidad personal

En ciertas circunstancias, los directores de la empresa pueden ser considerados personalmente responsables de las deudas fiscales, especialmente si se demuestra negligencia o fraude.

Impacto en la reputación e intereses.

El incumplimiento fiscal también puede tener consecuencias significativas en la reputación y las operaciones de la empresa:

Daño en la reputación

La noticia de que una empresa no paga sus impuestos puede dañar severamente su reputación, lo que puede llevar a la pérdida de clientes y socios comerciales.

Dificultades para obtener crédito

Las instituciones financieras y los proveedores pueden ser reacios a extender crédito a una empresa con problemas fiscales.

Restricciones operativas

La HMRC puede imponer restricciones en las operaciones de la empresa, como limitar su capacidad para contratar personal o participar en licitaciones públicas.

Consecuencias según el tipo de impuesto

Las consecuencias pueden variar según el tipo de impuesto que no se haya pagado.

Impuesto sobre sociedades

La tasa principal del impuesto sobre sociedades en el Reino Unido es del 19%. No pagar este impuesto puede resultar en multas sustanciales y en la posible inhabilitación de los directores de la empresa.

IVA

El incumplimiento en el pago del IVA puede llevar a la HMRC a tomar medidas inmediatas, incluyendo visitas sin previo aviso y la posible revocación del número de IVA de la empresa.

Impuestos sobre la nómina

No pagar los impuestos sobre la nómina, como las contribuciones al seguro nacional, puede resultar en acciones legales tanto contra la empresa como contra los directores individualmente.

Medidas preventivas y soluciones

Para evitar estas graves consecuencias, las empresas deben

Mantener registros precisos

Es crucial mantener registros financieros detallados y actualizados para garantizar el cumplimiento fiscal.

Planificar con antelación

Las empresas deben presupuestar adecuadamente para sus obligaciones fiscales y considerar la posibilidad de hacer pagos a cuenta.

Buscar asesoramiento profesional

Contratar a un contador o asesor fiscal calificado puede ayudar a navegar por las complejidades del sistema fiscal británico.

Comunicarse con HMRC

Si una empresa enfrenta dificultades para pagar sus impuestos, es mejor comunicarse de manera proactiva con la HMRC. En muchos casos, es posible negociar un plan de pago.

Consideraciones después del Brexit

Es importante tener en cuenta que, tras el Brexit, han surgido nuevas consideraciones fiscales para las empresas que operan entre el Reino Unido y la Unión Europea. Por ejemplo, las contribuciones a fondos de pensiones de empleo del Reino Unido ya no se consideran gastos deducibles para empresas de la UE.

Conclusión

En resumen, no pagar los impuestos de una empresa en el Reino Unido puede tener consecuencias devastadoras, tanto financieras como legales. Las multas, los intereses, las acciones legales y el daño reputacional pueden poner en peligro la viabilidad de la empresa a largo plazo.

Es fundamental que las empresas prioricen el cumplimiento fiscal, busquen asesoramiento profesional cuando sea necesario y se comuniquen proactivamente con las autoridades fiscales si enfrentan dificultades.

El cumplimiento fiscal no solo es una obligación legal, sino también una parte esencial de una gestión empresarial responsable y sostenible en el Reino Unido.